TEODORA


TEODORA


Teodora (del griego Θεοδώρα) nació en el año 500 y murió en el 548. Fue una emperatriz y esposa de Justiniano I.



Ella es la del aro en la cabeza


INDICE

Antes del poder



Siendo emperatriz



Después su la muerte


Antes del poder




Hay varias teorías sobre su nacimiento: algunos dicen en Chipre y otros en Anatolia.
Su padre fue Acacio y no se sabe el nombre de su madre. Como ella, Teodora fue actriz.
Se fue de viaje a Egipto y cuando volvió conoció a Justiniano I. Pero no se podían casar porque la ley lo prohibía, así que él lo abolió, con lo que si pudieron.






Siendo emperatriz




En el 532 hubo un disturbio en Niká. Había dos bandos, los azules (que apoyaban a Justiniano) y los verdes (que apoyaban a Hipatio). Y en una carrera de caballos los verdes prendieron fuego a la ciudad poniendo a Hipatio como líder.
Justiniano y los otros iban a huir, pero Teodora les convenció para que atacaran y gracias a ella ganaron la revuelta. 




Revuelta de Niká


Después, restauraron Constantinopla y construyeron la iglesia más grande de Bizancio, la iglesia Santa Sofia. 




Santa Sofia, en la actual Estambul




Se puede decir que ella fue la primera feminista de la historia, porque admitió leyes que admitían el derecho de las mujeres, por ejemplo que podía casarse un noble con una campesina.


Símbolo ortodoxo


En lo que se refiere a la religión ella era monofista (que solo creen que Jesus era divino, no humano) y Justiniano ortodoxo (que creen parecido al catolicismo pero con diferentes ritos) lo que hubo algunas peleas. Justiniano quería convertir a Nobatia en ortodoxos, pero Teodora se le adelantó y los convirtió en monofistas.




 Nobatia (el país que los egipcios llamaban Nubia)





Ella murió en 548 por una peste bubónica, aunque también pudo haber sido un cáncer. Justiniano, por su muerte hizo un mosaico de ellos.

Arriba él y abajo ella




Después de su muerte


Su influencia con los monofisitas fue tan fuerte que Justiniano les construyo Pequeña Santa Sofia para su religión.

Pequeña Santa Sofia




Además gracias a ella Bizancio fue el Imperio más feminista en esa época.





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